martes, 1 de junio de 2010

Sevilla y Paco de Lucía.

Hace unos días estuve hablando con mi entrañable amigo, Joaquín. Nos envolvieron los recuerdos de mis añorados años vividos en Sevilla, donde puede disfrutar de su amistad y de la que afortunadamente sigo disfrutando pero ya de otra manera muy diferente. La distancia obliga.

Y decir Joaquín, es decir sabiduría popular, cultura y entrañables anécdotas. Un día paseando por Sevilla pasamos cerca del Sánchez Pizjuan, campo del fútbol del Sevilla, que a los béticos como él, les da el mal de pájaro agüero pasar a su vera, pero inevitablemente teníamos que hacerlo. Me comentó que una sola vez, en una sola ocasión en su vida, había estado dentro y por supuesto le pareció horrible el estadio, pero se celebraba un inolvidable concierto en vísperas de la Expo que no se quiso perder y aunque le salió sarpullido por todo el cuerpo y alma, acudió a casa del mayor enemigo, futbolísticamente hablando.

Me comentaba que no recordaba (salvo cuando el Betis ganaba al Sevilla) haber disfrutado tanto como aquella má
gica en Sevilla. Nada menos que Placido Domingo, Julio Iglesias, la soprano Guadalupe Sánchez, Manuel Alejandro el compositor y una orquesta de primer nivel. Noche inolvidable, noche para recordar siempre. Me seguía contando que nunca vio a tanto público estar entregado a unos increíbles magos de la canción y de la música. Espectadores vibrando por la emoción y las "palmas" acompañando a la música sonaron más bellas que nunca. Joaquín lloró de la emoción aquella noche, así me lo confesó.

Recordaba que al cielo de Sevilla llegaron aquellas canciones que siguen siendo inolvidables como «Soñadores de España», «El grito de América» o «Sevilla» Aquella noche, marcó un hito que sigue vivo todavía, en especial cuando Plácido y Julio Iglesias cantaron a aquellos inmortales soñadores españoles, soñando con Picasso, Lorca, Teresa de Ávila, D. Alonso Quijano… Noche espléndida, especial, se escuchó también a Puccini, a Verdi, al maestro Guerrero…

Pero algo i
nesperado también ocurrió aquella noche y que marcó de alguna manera el magno concierto. El genial Paco de Lucía, debía acompañar a estos grandes con su guitarra; pero la organización no fue justa con el algecireño, le menospreció y no estuvo a la altura que él merece y que a fuerza de trabajo y sudor se ha ganado merecidamente. Paco de Lucía jamás puede ser relegado a un segundo lugar en la confección de un cartel anunciador. No puede figurar nunca como relleno, es el otro número uno y como tal así se le debe considerar. Renunció a actuar, no compareció. Hizo muy bien en no consentir que su nombre no estuviera al mismo rango que Plácido Domingo o Julio iglesias.

Joaquín, así me lo contó, así lo entendí y así lo escribo porque creo, al igual que mi
amigo, que Paco, el hijo del gaditano Antonio y de la portuguesa Lucia, siempre merecerá estar al mismo nivel en el mundo de la música, como cualquiera de los más grandes.




4 comentarios:

KOKYCID dijo...

Estimado Alvaro, Paco de Lucia es un genio, no cabe duda. Placido Domingo un estupendo tenor, pero yo desde crío (con 17 añosle escribí una carta y todo -logicamente nunca me contesto-) soy un incondicional de Julio Iglesias. Tengo todos sus CD (originales) y me parece que es un cantante al que no valoramos en su justa medida. A mni mujer no le gusta, aún asi, hace unos años me acompaño a un concierto suyo en Clunia y salió alucinada de su capacidad de comunicación y hasta de su voz (cuando quiere, tiene algo más que melodía).

Álvaro Tilo dijo...

Aquel final de verano, Koky, cuando J. Iglesias actuó en el Teatro Romano de Clunia vi la publicidad, en la visita que hice a las ruinas y siempre pensé que haciendo buena noche, debería ser un gran acontecimiento aquel concierto. Vivo demsiado lejos como para poder haber ido, pero supongo que a los que pudisteis asistir debió merecer la pena.

Un cordial saludo

Atapuerques dijo...

Paco de Lucía ya está en el olimpo de los artistas como mejor guitarrrista flamenco.
Aún recuerdo la emoción del concierto que dió en Burgos hace años o en Gran teatro o en el Avenida.
Un saludo, Alvaro

Álvaro Tilo dijo...

Como bien dices, es el mejor y creo que junto a Narciso Yepes en guitarra clásica son los dos más grandes. La pena es que el murciano se nos fue.

Un cordial saludo.